A continuación Igna EF, que puedo decir de el nos conocemos hace mucho; más de 2/3 de nuestras vidas viéndonos, divirtiéndonos, disfrutándolos, hablando de cualquier tema que la vida pueda poner en nuestras bocas, hojas, o paginas web
Caminando mas cerca de mi primer paso que de mi último suspiro, me doy cuenta que me encuentro solo. Infinitamente solo. Imágenes de odio, muerte y codicia me hacen pensar que no hay nada ni nadie alrededor mío. Se enciende una llama en mi, una llama distinta a las que veo en todas direcciones a lo largo del sendero en el que ando.Mientras camino la flama se choca con muchas cosas pero solo las atraviesa, parece que nada se contagia de ella, nada arde ante ella. Una voz me dice que mi fuego es ficticio, que no existe, luego otra voz lo repite, luego otra...
Me sumo en mis pensamientos, siento la flama bien adentro mío, a pesar de lo que me dicen esas voces. No dejo que cambie de color, no dejo que se apague.
Las luces alrededor del camino se acercan a mi, yo me acerco a ellas. De repente ellas lanzan lenguas de fuego hacia mi, me queman.... me arde, pero puedo soportarlas. Trato de responder pero al parecer mi fuego no los quema, ahora una puerta se interpone entre nosotros. Intento abrirla de mil maneras, pero nada ocurre, mis flamas no la consumen.
Sigo caminando.
Todavía veo las luces alrededor del camino, ya no quiero hacerlas sentir mi fuego, ya no quiero abrir la puerta....
Pero todas las llamas se unen en una y se abalanzan sobre mi, quieren sofocarme con su calor extremo pero ya no lo siento, ya no me quema, soy inmune.
Emprendo mi campaña nuevamente, mi luz sigue brillando tal como antes, ella ilumina mi camino, no me guía, no me dice que camino elegir, solo... ilumina.